Inicio » Catálogo » La fiesta del desierto
La poesía no existe hoy para casi nadie. El poeta moderno no tiene lugar en la sociedad actual. Desde la revolución industrial la filosofía, la literatura y el arte han sufrido un trauma del que todavía no se han recuperado y la poesía no se ha escapado de esta enfermedad fabril.
Este poemario fue primer premio de Poesía Ciudad de La Laguna, y se reedita ampliado y con las ilustraciones que una íntimo amigo de Juan Carlos de Sancho, ya fallecido, realizó hace muchos años sobre uno de los libros de la primera edición.
Comentaba Alonso Quesada que todo lo que se institucionaliza se idiotiza. Si añadimos a esa afirmación que toda profesión produce corcova pues imagínense ustedes el asunto: la poesía no es una profesión, tampoco pretende ser una institución. Conclusión: los poemas en esta sociedad industrial no valen nada (no son productos susceptibles de intercambio mercantil) y al carecer de valor pues no tienen exis-tencia real dentro del mundo. La existencia de la poesía está fuera de ésta órbita mercantil. Por eso la poesía hoy apenas existe para nadie.
La poesía es otra realidad, otra identidad, es otro mundo. El poeta renuncia a una identidad colectiva y se sumerge en una totalidad zombie y esperpéntica. El mundo no le gusta y sale de él a riesgo, claro está, de desintegrarse (pero es un riesgo que acepta voluntariosamente). El poeta asimila la totalidad y convive con ella continuamente. Ustedes compren-dan que convivir con una totalidad no es moco de pavo: la totalidad es algo así como un elefante de 10 toneladas sobre una hormiga de tres centigramos. La hormiga, gracias a una condición genética especial, y de la que carecen las cigarras, soporta a su pesado elefante estoicamente, disciplinadamente. Claro está que la imagen es muy surrealista y está lejos de reflejar el trabajo poético, tan indisciplinado él, pero sí podría representar de una manera aproximativa el esfuerzo de la creación lírica, un continuo trabajo insectívoro soportando a duras penas la totalidad que está encima.
